La opción del "no" ganó el referendum llevado a cabo en Grecia el domingo, extendiendo el suspenso acerca de cual será el desenlace de la crisis que azota al país heleno, y su eterna negociación con sus socios europeos.
La ventaja de la opción ganadora fue amplia, por encima del 60%, lo cual a su vez fortalece la posición del gobierno de Alexis Tsipras, que de pronto ve favorecida su postura de no acordar con la Eurozona bajo las condiciones impuestas por esta. No obstante, luego de agradecer a sus votantes, Tsipras dijo el domingo que a partir de la fecha iniciará una nueva negociación.
Cuál sería el motivo para tomar esta acción, justo en momentos en los que políticamente se ve fortalecido? Es muy sencillo de entender; tanto como la posición del resto de Europa. Desde que estalló este conflicto sostenemos que, pase lo que pase con la deuda, a nadie le conviene que Grecia se retire del euro. Si esto sucediera, la deuda griega, que supera los 300 mil millones de euros, quedaría en un limbo prácticamente impagable, dado que con una nueva moneda -el dracma-, Grecia no obtendría muchos euros luego de devaluar su propia divisa.
Para Grecia, dejar de pagar y hacer de cuenta que nada ha ocurrido puede ser una toma de oxígeno que le durará horas. El país quedaría aislado del mundo en materia financiera, y extendería su crisis actual. Esto es lo que sucedió en Argentina, en 2002, solo que el país sudamericano devaluó su moneda -el peso-, y desancló el mismo al tipo de cambio 1 a 1 que sostenía con el dólar, que actuaba como una especie de euro en dicha época.
Consciente de que esta victoria es solamente política, pero que financieramente no le aporta mucho, Grecia debe encontrar una salida que le permita ganar tiempo, y Europa tener la paciencia de saber que no cobrará sus acreencias en los próximos meses. Ya pasó días atrás con el FMI, y pasará lo mismo con el BCE en dos semanas.
El clima, de todos modos, no parece agravarse tanto en las primeras horas del lunes; el euro abrió la semana apenas 120 puntos abajo del cierre del viernes, el yen ganó unos 100 puntos -otra vez buscada como moneda de refugio-, mientras la libra Esterlina y el oro, que el lunes pasado habían sufrido movimientos fuertes en la apertura, no presentaron variantes de importancia.
La renuncia del ahora Exministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, no es más que otra muestra de esa especie de épica heróica que trata de transmitir el gobierno griego, que se esmera en hablar de dignidad, honor y lucha, pero no de deudas. Hay gobiernos sudamericanos que a diario ofrecen ese tipo de espectáculos, aunque por repetidos ya no aparecen en los titulares del mundo.
El resto del lunes ofrecerá como dato de importancia el ISM de servicios en Estados Unidos, a las 10:00. Este informe podría arrojar cifras mejores que en mayo, impulsando al dólar; este, naturalmente, viene creciendo ante el euro y también ante las monedas vinculadas al petróleo. Sin embargo, la divisa norteamericana parece en estos días consolidar sus ganancias, profundizando solo sus ganancias ante el dólar canadiense, el peso mexicano -que no deja de tocar mínimos históricos día a día-, y al dólar australiano.